La abubilla es un ave esbelta de alas redondeadas con bandas blancas y negras, cuerpo pardo rojizo y cresta de plumas también rojizas con puntas blancas y negras, que solo despliegan al posarse. Anidan en huecos de los árboles y habitualmente aprovechan los de otras aves. Suelen poner entre 7 y 9 huevos, que incuban durante quince días.
Son de cabeza pequeña, patas cortas y pico largo y estrecho en curva hacia abajo, que utilizan para buscar insectos en el suelo o en grietas de los árboles. También se alimenta de lagartijas. Son muy huidizas y no es fácil localizarlas cuando están en el suelo. Buscan el abrigo de matorrales o muros de piedra para pasar desapercibidas.
Una de las especies de pájaros que se han establecido en la zona es el rabilargo. Tiene forma de urraca, con la diferencia de su color gris azulado, su papo blanco y su cofia negra en la cabeza. Buscan los bosques tupidos para la cría. Es difícil verlos si no es en vuelo, ya que se esconden enseguida entre el follaje.
Las urracas o pegas son pájaros grandes con un peso aproximado de un cuarto de kilo. Tienen un pico fuerte y robusto de color negro, alas grandes y cola larga. Muestran el clásico color negro con vientre blanco que les hace inconfundibles y les vale el apodo de “aves pías”. Aunque a pesar de su apariencia, tienen las alas azules y la cola verde.
Comen insectos y semillas las cuales a veces almacenan. Prefieren los lugares abiertos. Su precocidad les lleva a hacer su primera nidada al comienzo de su segundo año de vida. Mantienen su pareja muchos años al igual que su territorio, que defienden agresivamente. En un sitio con abundancia de urracas es habitual encontrar gran cantidad de plumas perdidas en las peleas.
Las collalbas ocupan una gran extensión de terreno, sobre todo en la zona del Prado del Toro y Valdenoguera, donde es frecuente verlas, bien en la cima de postes o cercas o camufladas entre la tierra.
La collalba presenta una gran variación de plumaje en función de sexo y época del año. Sin embargo es un ave de verano y no aparece en época invernal, en que emigra a África.
Suele moverse por el suelo y evita los sitios altos, como árboles y arbustos. La collalba gris muestra un lomo de gris a pardo que llega hasta la cabeza, banda blanca sobre el ojo y negra en el mismo.
El zorzal o tordo común no suele verse fuera de la época invernal. Muestra la pechera cubierta de gran cantidad de puntos marrones sobre fondo blanquecino. Se alimenta de lombrices, caracoles, babosas y otros invertebrados, aunque también de frutas. Construye su nido con hierba revestido con barro y estiércol.
Un ave que a primera vista puede confundirse con una alondra es la terrera común, a causa de sus bandas pardas. Come en el suelo y se mueve a saltos en lugar de caminando como la alondra. Se alimenta de insectos y semillas que recoge del suelo.
De la misma familia de las cotovías es la calandria. No tiene cresta y si una banda clara que arranca del ojo y una mancha negra en el cuello solo bien visible cuando se estiran. Se encuentra en llanuras abiertas y zonas pedregosas.
Similar a la cogujada común aunque de menor tamaño, es la totovía, llamada también cotovía pequeña, que dispone de una cresta más reducida y se caracteriza por una mancha negra lateral y unas bandas negras paralelas en la cabeza. Come en el suelo, lo que le ocupa gran parte de su tiempo.
Un pájaro muy habitual es la cogujada común, conocida también como cotovía crestada debido a su canto y a su penacho de plumas marrones orientado hacia atrás. Dicho penacho es abatible y solo lo levantan al alzar el vuelo o cuando están en tensión por la posible presencia de enemigos. Les hace parecer más amenazadores. Tiene un tamaño de entre 12 y 23 centímetros, pico robusto, cónico y protegido por algunas plumas. Poseen alas largas y anchas, patas altas y dedos que les permiten moverse con facilidad. Se alimentan de insectos y semillas cuando estos escasean. Es frecuente verlas caminar por caminos y campos.
Están muy dotadas para el vuelo, describen arcos amplios y pueden ascender casi en vertical, cambiando de dirección muy rápidamente, para escapar de los ataques de sus enemigos. Aparece con más frecuencia a primeras horas de la mañana y a últimas de la tarde, cuando las temperaturas son más bajas. Construyen sus nidos en el suelo, que esconden entre las hierbas. Crían desde finales de marzo hasta julio.
Gran número de aviones roqueros se localizan en el valle del Águeda, donde construyen sus nidos aprovechando salientes de roca, entradas de túneles y pilares de puentes del ferrocarril. Al contrario que los de los aviones comunes, estos suelen ser abiertos por arriba como los de las golondrinas. Se internan a veces bastante en algunos túneles, y por la rapidez de su vuelo pueden confundirse a primera vista con los murciélagos que infestan el lugar.
Tienen el cuello muy corto, por lo que la cabeza está casi directamente unida al tórax, ojos grandes, de color negro azabache y pico corto, que remata una boca adaptada para capturar insectos en pleno vuelo. Su zona de caza se sitúa a una altitud superior a la de las golondrinas, aunque inferior a la de los vencejos.
Cuando necesitan agua, descienden en picado hacia los ríos o lagos y la recogen con el pico de su superficie, para remontar luego el vuelo. Las bandadas de aviones comunes se reúnen en cables en otoño antes de emigrar hacia el África tropical, donde invernan, época aprovechada por los gorriones para hacer uso gratis de sus nidos. |
Avión común
Muchos aviones comunes pueden verse al amanecer y al atardecer revoloteando cerca de los tejados, que llenan de nidos (a veces varias decenas de ellos en pocos metros). Su nombre deriva de su excelente maniobrabilidad en vuelo y sus espectaculares giros y picados. Son extremadamente rápidos, aunque no tanto como vencejos y golondrinas. Se alimenta de insectos capturados en vuelo, aunque también los recoge del suelo. Durante el día van de un lado para otro, pero a la caída de la tarde se agrupan y vuelan en círculos a baja altura. Los que tienen crías se acercan a los nidos para alimentarlas. Tras cuatro o cinco semanas los polluelos abandonan el nido, por lo que existe a partir de entonces una feroz competencia para ocupar nidos abandonados. Al amanecer ocurre un proceso similar.
Los nidos de avión común tienen forma de cuarto de esfera con solo un pequeño agujero en la parte superior. Un agujero por el que no cabe un adulto. Solo las crías y con las alas plegadas. Esto evita la entrada de intrusos de gran tamaño que pudieran poner en peligro a la cría. Un atacante con fuerza suficiente para romper el nido probablemente buscará una presa mayor que una cría de avión. Sin embargo, las crías tienen un enemigo en esta fase: las urracas. Con sus fuertes picos pueden llegar a romper los nidos. Los aviones no gustan de las borrascas, ya que durante ellas no encuentran los insectos voladores de los que se alimentan. Cuando el tiempo empeora los aviones desaparecen y pueden tardar tiempo en volver por los nidos. De hecho los polluelos pueden aguantar largo tiempo sin comer en espera de los padres. Dicho nido lo fabrican exclusivamente con barro que recogen del suelo, lo que le confiere una gran dureza. Los nidos, habitualmente esféricos, pueden ser más complejos, contando algunos con varias cámaras. |
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Bastantes palomas pueden verse en las proximidades de la Iglesia, casi todas pertenecientes a la variedad bravía. Estas palomas, presentan un color grisáceo con unas plumas iridiscentes en el cuello que les dan unos colores verdosos y rosados. La verdadera bravía se reconoce por las dos bandas negras del extremo de las alas. Las palomas que muestran otros diseños, comunes en calles y plazas de pueblos y ciudades, provienen de ejemplares domésticos asilvestrados. Tienen un aspecto rechoncho, cuello corto y patas también cortas de cuatro dedos, uno de ellos hacia atrás. Se alimentan de semillas, y cuando beben, a diferencia de otras aves que levantan la cabeza para tragarla, las palomas la succionan de forma continua sin necesidad de levantar la cabeza.
La tórtola turca o rola turca, que se divisa de vez en cuando en los alrededores del pueblo, es más pequeña que la paloma bravía, de color arena con un medio collar en la nuca de color negro orlado de blanco. Se alimenta de granos, semillas y brotes del suelo de campos y jardines. Pone dos huevos en cada una de las varias nidadas que realiza a lo largo del año.
Gorrión común macho
Son muy comunes los gorriones, también llamados pardales por el color pardo de su plumaje. Los gorriones adultos se alimentan de granos, de ahí que no sean bienvenidos en época de cosecha. Sin embargo alimentan a sus crías con insectos, al ser estos más nutritivos y tener gran cantidad de proteínas necesarias para su desarrollo. La parte superior del pico sobresale ligeramente sobre la inferior, lo que le facilita la recogida de grano. Forman grandes bandadas, persiguiéndose unos a otros con una gran algarabía. En invierno suelen ocupar nidos vacíos de avión común.
El gorrión común presenta un dimorfismo sexual consistente en la variación del plumaje, más vistoso en el macho, en el que se observa su característica “corbata” negra.
Gorrión común hembra
En los túneles 1 y 3 del ferrocarril habitan murciélagos, sobre todo en éste último, donde se encuentra una colonia de unos 10.000 individuos, hasta tal punto que las vías llegan a desaparecer cubiertas por sus deposiciones y sus gritos son ensordecedores.
Son animales pequeños, de no más de 6 cm y 36 de envergadura. Pesan entre 13 y 34 gramos. Suelen volar bajo y lentamente. Encuentran refugio en cuevas, minas abandonadas o huecos de los árboles o, como en este caso, en los túneles del ferrocarril, donde su sistema de ecolocalización les resulta de gran ayuda. Se alimentan de insectos voladores y escarabajos del estiércol. Suelen formar grupos bastante numerosos y utilizan los desvanes espaciosos como paridero. Son capaces de distinguir frecuencias entre 15 y 150 Khz. Como comparación el ser humano solo llega a 20 Khz. Pueden detectar un alambre de 0,1 milímetros de grosor incluso con elevado ruido ambiente.
Uno de los más comunes es el murciélago de herradura, que se caracteriza por tener unos repliegues cutáneos en la nariz en forma de herradura. Suelen vivir en grutas y forman grupos bastante numerosos. Entran en letargo en invierno y descansan envueltos entre sus alas. No son buenos voladores y cazan insectos a poca altura.
También aparecen a veces jabalíes. Desaparecieron del lugar en los años 1960 a causa de una epidemia de gripe porcina, pero se ha repoblado la zona con nuevos ejemplares. No suelen verse a plena luz del día, ya que son animales crepusculares y nocturnos, pero si sus excavaciones en busca de raíces para alimentarse, sobre todo en la zona de Rebeja y los Berrocales y próximos a los ríos.
Los machos son solitarios y las hembras viven con sus crías. Suelen vivir unos 10 años. Poseen colmillos de hasta 30 cm, que utilizan para buscar alimento o para defenderse, por lo que conviene no molestarlos o apartarse inmediatamente de su camino si se acerca uno.
La población ha aumentado lo suficiente para que ya no esté en riesgo su supervivencia. De ahí que de vez en cuando se organicen salidas de caza del jabalí, cuya carne, parecida a la del cerdo, es muy apreciada.
Entre los animales que se mueven por el lugar son abundantes el conejo y la liebre ibérica, animales muy prolíficos, que tienen varias camadas al año.
En determinadas partes del término puede localizarse esta especie, el escribano montesino, que se caracteriza por su color pardo rojizo y unas bandas negras en la cabeza con rellenos blancos. Gusta de comer cerca de carreteras o en lugares pedregosos. En verano se alimenta de insectos, y el resto del año de semillas que recoge del suelo.
De similar aspecto que el escribano es el triguero. Con un cuerpo rechoncho y más grande que un escribano, muestra un aspecto parecido al de una alondra. Podría confundirse con una cotovía de no ser por la falta de penacho. Forma pequeños grupos para comer, lo que hace en el suelo dando saltos en lugar de caminando como la alondra. Se alimenta de insectos y semillas.
El herrerillo común tiene entre 10 y 14 cm y un peso no superior a 20 gramos. Su pico es pequeño, corto y cónico con bordes lisos. Posee unas patas fuertes, con las que es capaz de colgarse boca abajo de las ramas. Muestra la clásica coloración de vientre amarillo y espalda azul, con mejillas blancas, casquete azul y banda negra a la altura de los ojos.
Se alimenta de insectos y arañas que captura moviéndose rápidamente entre las ramas de los árboles. El nombre proviene del tono de su canto, similar al sonido del trabajo de un herrero.
Los jilgueros son relativamente abundantes en zonas bajas de clima más cálido. Se mueven rápidamente por las ramas de los árboles y se quedan quietos poco tiempo excepto para comer. Su diseño es inconfundible. Se caracterizan por una mancha roja alrededor del pico y una banda de color amarillo intenso en las alas que se muestra en forma de una estrecha franja en reposo.
Poseen una serie de manchas blancas en su negra cola y una mancha negra en forma de “T” en la cabeza, bien visible cuando la bajan, que rodea unas mejillas y papo blancos.
Hacen dos nidadas al año, entre mayo y agosto, compuestas cada una por 5 ó 6 huevos. Se alimentan de semillas a medio madurar de plantas bajas, habitualmente cardos y diente de león, como en las fotos. Con menos frecuencia en el suelo. También se alimentan de insectos.
La pholcus phalangioides suele encontrarse con frecuencia en las casas o desvanes, en sitios oscuros y húmedos. Teje telarañas irregulares. El caparazón es de contorno redondeado y las patas son extraordinariamente largas. La cabeza tiene un par de pequeños ojos flanqueados por dos grupos de tres ojos muy juntos.
Con más proporción de negro que la capirotada, la curruca cabecinegra aparece en zonas pedregosas, con arbustos y matas aisladas. Como su nombre indica, posee una cabeza enteramente negra, papo blanco, vientre blanquecino y lomo de color gris. Es característico su círculo ocular rojo. Come insectos y arañas que captura en el suelo o en plantas bajas.
La curruca capirotada se caracteriza principalmente por una cofia negra que llega hasta la altura del ojo. Es bastante común en las zonas más altas del término, cerca de bosques de encinas con arbustos. Son solitarios, aunque algunos pueden comer en grupo. Se alimenta de insectos y bayas carnosas.
Más escasa que la común, la tarabilla norteña se deja ver de vez en cuando al norte del término. Más frecuente a finales del verano, durante su emigración a África. Se suele colocar en sitios altos para lanzarse sobre insectos o gusanos que localiza en el suelo.
Tarabilla común macho
La tarabilla común suele colocarse en la parte alta de arbustos o postes en lugares abiertos para capturar insectos al vuelo, arañas, gusanos y semillas, tras lo que regresa a su sitio para comérselos. Suelen desplazarse a zonas más templadas durante el invierno. Hace dos nidadas al año con media docena de huevos cada una. El macho tiene la cabeza negra, el cuerpo rojizo y una banda blanca que a veces separa completamente las dos zonas y otras se interrumpe, mientras que la hembra es más parda y uniforme con una banda clara sobre el ojo.
Tarabilla común hembra
El papamoscas cerrojillo o negro se caracteriza por tener una mancha blanca en las alas con dos o tres rayas dirigidas hacia atrás y una hacia adelante. Suele colocarse bajo los árboles al acecho de moscas que captura en vuelo o insectos que estén en el suelo. La hembra tiene un plumaje más claro que el macho, aunque en otoño suelen parecerse mucho.
De la misma familia que los mosquiteros son los carriceros. El carricero común muestra una garganta blanca y lomo pardo, y se encuentra en lugares cercanos a zonas húmedas, aunque a veces cría en sitios secos. Al igual que el anterior se alimenta de insectos y arañas presentes en humedales, así como de semillas.
Una especie similar al mosquitero musical es el mosquitero silbador, caracterizado por tener colores más vivos y una banda amarilla más intensa y gruesa sobre los ojos. Es de mayor tamaño y menos extendido. Se mueve con facilidad entre el follaje y se alimenta de insectos y arañas.
El verderón se alimenta de granos. Tiene un pico potente, plumaje amarillo verdoso con manchas alares amarillo vivo. La hembra tiene un color verde grisáceo. Su vuelo es parecido al de un murciélago. Cría de abril a agosto en nidos de gran tamaño que construye en árboles o arbustos. Los jóvenes muestran un plumaje más pardo que el adulto.
La perdiz roja es un ave relativamente abundante aunque algo asustadiza. Son aves pesadas y de alas cortas, por lo que hacen un gran ruido al despegar. Se desplazan en grupos de bastantes ejemplares, incluso por el suelo, y son fáciles de encontrar sus rastros en los caminos con multitud de huellas de tres dedos.
Un ave similar al herrerillo es el carbonero, caracterizado por tener un casquete negro sobre la cabeza, que se prolonga hacia abajo rodeando unas mejillas blancas, y se interna luego atravesando un vientre amarillo. El lomo es de color verde, enmarcado por unas alas y cola azules. Busca en el suelo los insectos, bayas y semillas de los que se alimenta.
Construyen su nido en agujeros naturales a base de hierba y musgo. Hacen una sola nidada al año, en primavera, pero en la que pueden poner hasta once huevos. Suele encontrarse a veces en grupos poco numerosos.
Los mosquiteros son aves pequeñas que se mueven con facilidad entre el follaje. El mosquitero musical es el más común de ellos. Suele ser solitario, excepto cuando da de comer a las crías o cuando se reúnen a comer en el mismo árbol durante la emigración. Realiza una nidada en los meses de abril o mayo, compuesta por 6 ó 7 huevos.
El nombre lo recibe por su melodioso canto, que despliega especialmente en primavera. Prefiere bosques poco densos. Se alimenta de insectos y arañas que recoge del follaje. Captura moscas al vuelo.
Chrysolina cerealis
Las chrysolinas pertenecen a la familia de los escarabajos de las hojas. Gustan de los setos vivos y prados húmedos, donde se alimentan de menta y plantas emparentadas. Muestran un cuerpo redondeado y una coloración variada según especie.
Chrysolina polita
Escarabajo del romero (Chrysolina americana)
Esta araña de origen canario se ha extendido por muchos lugares de Europa a través de los plátanos de Canarias. Muestra una gran capacidad de adaptación a climas tan diferentes del canario como el alemán o el británico. Es conocida también como "falsa viuda negra", aunque su picadura, muy dolorosa, no lo es tanto como la de la verdadera. No obstante, no es una araña agresiva y se esconde rápidamente al ser molestada en su tela en forma de tubo.
La olios argelasius es una araña agresiva, de rápidos movimientos y capaz de realizar saltos en cualquier dirección, incluso hacia atrás. Dispone de un potente veneno, aunque no resulta peligrosa para los humanos. Acechan a sus presas en las hojas de los árboles o en el suelo entre la hojarasca.
Estas arañas tienen un color de base que puede ser rojo, blanco o amarillo, con un patrón negro, que algunos ven similar a la silueta de Napoleón. Las dos pares de patas anteriores las utilizan para capturar insectos que se mueven entre las flores. Las dos traseras, menos desarrolladas, se utilizan exclusivamente para el movimiento. No tejen red, pero son cazadoras activas.
La araña de saco es habitual entre el follaje y en estructuras humanas, donde ponen los huevos. Pican con facilidad sin mediar provocación. Dicha picadura es dolorosa, pero sin consecuencias serias. La sensación de quemazón asociada dura una hora o más y la erupción y la ampolla aparecerán durante las siguientes diez horas.
La filistata insidiatrix es una araña que construye nidos en forma de embudo abierto hacia el exterior con una malla de hilos radial, en abrigos de roca en encinares. Con frecuencia forman colonias de muchos ejemplares en la superficie de una roca. La hembra mide unos 14 mm, el doble que el macho.
La nuctenea umbratica presenta un pronoto pardo rojizo con la parte superior más oscura. Es de hábitos nocturnos y se localiza en hendiduras de postes, rocas, troncos, donde suele mantenerse toda su vida. Tiene una tela excéntrica de aspecto abandonado de unos 70 cm de diámetro. Se coloca fuera de ella unida con un hilo avisador.
La xysticus cristatus es de la familia de las arañas cangrejo. Las hembras suelen ser más claras que los machos. Muestran un triángulo oscuro flanqueado por dos bandas oscuras en el caparazón. El abdomen tiene el típico diseño de triángulos claros solapados. Suele moverse por el suelo y es más común en la primavera o a comienzos del verano.
La philodromus albidus tiene un abdomen marrón anaranjado. Patas de color naranja-marrón, con manchas marrones. Cefalotórax de color amarillento con puntos brillantes. La hembra es más grande que el macho.
La araña calabaza o araña verde común es de los más pequeños de los argiópidos. De color amarillo a verdoso con varias depresiones paralelas. La hembra tiene un color verde brillante y es mayor que el macho. Tejen una tela pequeña y excéntrica sobre una amplia variedad de arbustos y árboles y a una altura nunca inferior a 1,5 metros. Tiene una mancha de color rojo debajo del extremo del abdomen.
La holocnemus caudatus es una araña de la misma familia que la anterior, los fólcidos, con los que comparte las largas patas. Se diferencian de estos por un cuerpo globoso de color grisáceo con marcas oscuras en su parte central. Su tela es grande, horizontal y sujeta con hilos irregulares. Se puede encontrar en huecos de muros o de laderas.
Las eusparassus dufouri son arañas terrestres, aunque bastante ágiles y buenas trepadoras. Alcanzan un gran tamaño y, debido a su peso, no tejen tela. Son excelentes cazadoras y confeccionan nidos de fina seda donde se alojan, bajo piedras o cavidades del suelo.
La argiope lobata se reconoce por los cuatro lóbulos de cada lado del abdomen, tres grandes y uno más pequeño. Frecuente en grupos densos de escobas. Aprovecha la vegetación espesa para colocar sus telas, que suelen ser de gran tamaño. Teje telarañas verticales y circulares, con un eje central, líneas radiales y espirales de seda pegajosa y no pegajosa.
Suelen tener un abdomen muy grande y ovoide. Tienen ocho ojos, a menudo con los cuatro centrales formando un cuadrado y los dos de cada extremo hacia los lados de la cabeza. Hace una puesta con forma de un capullo de color blanco.
Ommatoiulus rutilans
Los milpiés se caracterizan por tener dos pares de patas por segmento al contrario que los ciempiés que solo tienen un par. Dichos segmentos suelen ser de sección circular. Se alimentan de materia vegetal viva y muerta.
Se encuentran dos especies del género Ommatoiulus. La especie sabulosus, reconocible por las dos líneas amarillas del dorso, forma concentraciones muy numerosas y puede trepar a los arbustos. La especie rutilans, de color metálico se ha adaptado a los ambientes cálidos y secos y se la puede ver caminando bajo el sol. Solo es acti-va en primavera y verano y se entierra en invierno.
Ommatoiulus sabulosus
El armadillidium vulgare pertenece a la familia de las cochinillas de la humedad, aunque habita en lugares más secos que otras. Cuando se siente amenazada se enrosca en forma de una esfera casi perfecta, por lo que se le conoce a veces como “bicho bola”.
Es el clásico escarabajo de la pelota. Hace una bola de estiercol y la entierra para acumular alimento. Es frecuente que se peleen por la posesión de las pelotas. Sus patas delanteras están adaptadas para excavar, y están formadas por una serie de lóbulos dispuestos en abanico. El S. sacer es enteramente liso al contrario que el más común S. semipunctatus que muestra hoyos en su parte delantera.
El capnodis tenebrionis muestra un color negro sucio con moteado blanco y aparece con frecuencia en zonas de almendros. Sus larvas excavan en ramas y raíces de esta y otras especies del género Prunus.
El escarabajo dorado es un escarabajo ancho y algo aplanado, de color verde con algunas marcas blancas. Posee unas características antenas, de ocho a diez segmentos y terminadas en una clava. Se alimenta de néctar de muchas tipos de flores. Las larvas viven en la madera en descomposición, principalmente en sauces viejos.
Los zapateros se encuentran con frecuencia en aguas limpias de estanques y remansos de ríos. Su presencia es indicativa de aguas aptas para el consumo, ya que no sobreviven en aguas contaminadas. Se deslizan rápidamente sobre las aguas remansadas utilizando sus cuatro patas traseras, mientras que las dos delanteras las utilizan para capturar insectos.
Grillo común |
Grillos y chinches
Estas chinches de color rojo cuentan con multitud de especies diferenciadas por el diseño de su lomo, incluso con variaciones por género. Se encuentran en grupos numerosos y se mueven con rapidez. Se alimentan se semillas caídas y a veces atacan a otros insectos. Chinche roja (cría) Chinche de las calabazas |
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Unos insectos similares a las avispas, pero más emparentados con las moscas son los conópidos, caracterizados por un apéndice frontal largo y la parte terminal del abdomen dirigida hacia abajo. Son más frecuentes con las altas temperaturas. Las larvas parasitan internamente a los abejorros, a los que terminan matando. Conops quadrifasciata |
Abejas y avispasAvispa alemana Las avispas más comunes son las del género polistes (papeleras), que construyen nidos sin envoltorio externo al contrario que las del género vespa . Los nidos de las polistes cuelgan de un corto pedúnculo y lo construyen en huecos de los árboles o del terreno. Cuando descansan repliegan las alas en pliegues longitudinales a lo largo del cuerpo. Nido de avispa común Abeja de la miel
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Calliptamus barbarus La langosta egipcia es un grupo especial. Son de gran tamaño, y se caracterizan por un color pardo uniforme y un ojo alargado verticalmente con rayas verticales amarillas y negras. Cuando están solas son inofensivas. Sin embargo, cuando forman enjambre son devastadoras y arrasan regiones enteras. Langosta egipcia |
Saltamontes y langostasSaltamontes común Los saltamontes suelen tener colores pardos o verdes. Gustan de la luz del sol. Su característica principal son sus dos patas traseras adaptadas para el salto. Poseen unas alas que despliegan durante el mismo y con las que alcanzan grandes distancias. Estas grandes alas las esconden estando en reposo bajo las alas anteriores, más duras. Saltamontes de alas azules Las langostas son especies diferenciadas de los saltamontes. Más grandes y con zancudas más largas, lo que les permite mayores saltos, pueden encontrarse asimismo en pardo o en verde. Las pardas suelen ser migradoras en grupo, mientras que las verdes son solitarias. Las hembras tienen un espolón en la cola que les sirve para poner los huevos, llamado ovopositor. Langosta migratoria
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La chloeon dipterum es una efímera que cría en muchos hábitats de agua dulce. El nombre de efímera se debe a su tiempo de vida. Solo viven un día en su estado final. Son conocidas como moscas de mayo, aunque pueden aparecer en otras épocas del año. Varían del marrón pálido al oscuro o negro con marcas amarillentas. Las alas anteriores son alargadas y ovales con un número reducido de venas. Los machos no tienen alas posteriores. Son uno de los platos preferidos de las libélulas.
Caballito del diablo rojo Los llamados caballitos del diablo no son propiamente libélulas. Tienen un aspecto menos robusto y en reposo mantienen las alas cerradas o parcialmente abiertas. Suelen encontrarse en lagunas o charcas ácidas. La lestes sponsa es de color verde con los extremos azulados y se suele encontrar en charcas con abundante vegetación marginal. Caballito del diablo esmeralda (Lestes sponsa) |
LibélulasLibélula violeta de alas caídas Las libélulas destacan enseguida por su cuerpo alargado, sus ojos de gran tamaño y sus grandes alas casi transparentes. El cuello tiene gran movilidad, lo que les permite un giro completo de la cabeza. Son insectos carnívoros que cazan al acecho. Se alimentan habitualmente de dípteros o efímeras. Viven en medios acuáticos o cercanos al agua. Libélula estriada Prefieren las aguas tranquilas o estancadas. Donde la corriente del agua aumenta, las especies de libélulas presentes disminuyen. Tienen unos colores muy llamativos que se van apagando a medida que se hacen mayores. Son unas de las criaturas más antiguas que existen. Ya estaban sobre la tierra antes que los dinosaurios. Libélula roja
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Oruga de la esfinge de la correhuela
Las mariposas tienen una fase de oruga previa. Algunos ejemplares son sorprendentes, como el de la fotografía superior. Una oruga de 10 cm y del grosor de un dedo que posee un aguijón en la cola y que se desplaza a una gran velocidad, casi un metro por minuto. Son las orugas propias del género esfinge, un grupo de mariposas nocturnas de gran tamaño, conocidas popularmente como ‘mariposones'.
Oruga de la esfinge de la lechetrezna
Oruga de la mariposa blanca de la col
Scopula marginepunctata |
Mariposas nocturnasEctropis bistortata Las polillas no son otra cosa que mariposas nocturnas por lo general, aunque algunas especies pueden salir de día. Se caracterizan por unas alas en general más cortas que las de las mariposas diurnas, un cuerpo más grande y unas antenas plumosas o más cortas. Las del macho suelen ser mayores y más complejas que las de las hembras. Dichas antenas funcionan también como órgano olfativo en época de celo. En reposo mantienen las alas plegadas. Las inferiores suelen tener colores más vivos y vistosos y solo las muestran en vuelo. Acronicta leporina Agrotis crassa |
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Morena serrana Manto oscuro Loba Ortiguera |
Mariposas diurnasMacaón Se pueden encontrar una gran variedad de mariposas. Su principal característica son los dos pares de alas membranosas de los más variados colores. Poseen una lengua chupadora llamada probóscide, con la que succionan los líquidos vegetales. Otra característica es el proceso de metamorfosis, que le hace pasar del estado de oruga con el que nacen al estado de mariposa propiamente dicho. Tienen una cabeza grande con dos ojos compuestos. Se considera que las escamas de las alas no son otra cosa que pelos modificados. Pandora Colocan los huevos sobre las plantas de las que van a alimentarse las orugas. Casi siempre en grupos de unos pocos hasta cientos de ellos. Las puestas suelen ser hacia finales del verano. Tras la eclosión la oruga suele comerse los restos del huevo. Las orugas tienen una serie de patas carnosas con las que se agarran con fuerza a las ramas. Antes de convertirse en mariposas sufren una serie de mudas. Blanca de la col Manto bicolor Cintia de los cardos
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Un híbrido entre una mantis y un insecto palo es la mantis hoja. No dispone de las largas antenas de las mantis y si de un cráneo terminado en punta. Su abdomen muestra unas terminaciones radiales características. En su forma adulta dicho abdomen se estira y pueden superar en tamaño a las mantis. Asimismo pueden variar de color con las mudas. La hembra no devora al macho.
Una variedad de mantis que a primera vista se puede confundir con una religiosa joven es la ameles que se diferencia por tener unos ojos puntiagudos y más salientes de la cabeza y un abdomen levantado. Al contrario que la anterior, la ameles macho tiene unas alas de las que casi carece la hembra. Esta especie no es caníbal.
La mantis religiosa tiene un punto blanco rodeado de negro en la parte interior del antebrazo. Una especie similar es la Iris oratoria, con alas anteriores más cortas y posteriores de color rojo y azul con manchas blancas y amarillas respectivamente, mientras que en mantis religiosa son de color pardo uniforme. Ala de iris oratoria |
Mantis religiosaMantis religiosa hembra Es muy común encontrar ejemplares de mantis. Un insecto que puede alcanzar hasta 10 cm de longitud y fácilmente reconocible por su clásica posición de acecho, que le ha valido el sobrenombre de ‘religiosa'. Se pueden encontrar en colores verde y amarillo amarronado. El color lo determina el del entorno en el que hayan tenido su última muda, de las que tienen varias antes de alcanzar su tamaño adulto. Mantis religiosa macho Son depredadoras que cazan al acecho. La flexible articulación de su cuello les permite seguir a la presa hasta que se pone a su alcance. Tiene la cabeza triangular y unos ojos grandes y muy separados. Su organización social es matriarcal. Una de sus costumbres más conocidas es que la hembra, de mayor tamaño que el macho, lo devora tras la cópula. Iris oratoria |
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Otros que se ven de vez en cuando (merodeando por rincones de las casas) son las salamanquesas, un tipo de reptiles llamados comúnmente ‘saltarrostros', por su supuesta afición a saltar a la cara de la gente, aunque lo cierto es que son inofensivas. Tienen cinco dedos en cada pata y solo dos de ellos poseen uña. Aunque es crepuscular y nocturna, suele salir de día a tomar el sol.
Está muy adaptada para trepar por muros, paredes, rocas y troncos de árboles, gracias a las almohadillas adhesivas de sus dedos. Hacen dos puestas al año. A mediados y al final de la primavera. Dicha puesta consta de dos huevos de un centímetro casi esféricos, que disponen debajo de las piedras, entre las cortezas de los árboles o en las grietas de los muros.
Se desarrolla bien en ambientes urbanos, con los gatos callejeros como sus peores enemigos.
El color de su cuerpo cambia según el momento del día y el lugar. De día presenta un color oscuro, por lo que destaca mucho sobre muros claros. En cambio, por la noche o en lugares oscuros, su cuerpo se aclara, produciendo un efecto mimético. En caso de peligro suele desprenderse de su cola. Esta cola vuelve a crecer, aunque nunca recupera el color y tamaño originales.
Lagartija cenicienta |
LagartijasLagartija colilarga Pueden encontrarse con frecuencia bastantes especies de lagartijas, habitualmente en zonas pedregosas y de matorral, donde pueden tomar el sol y esconderse rápidamente. Son amantes ocasionales de la vía férrea, por donde merodean con frecuencia. Se alimentan de escarabajos y hormigas, complementados con otros invertebrados. Muchas especies presentan una gran variación de color y diseño con la edad y el sexo. Lagartija colirroja Lagartija ibérica |
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El lagarto ocelado es un lagarto grande y robusto que puede alcanzar hasta 65 cm. Muestra un dibujo en forma de hileras de ocelos entre verdes y amarillos en el lomo y azules en los flancos. Suelen ser cazados por rapaces como milanos y azores y por la culebra bastarda. Se alimenta de insectos grandes, escarabajos, grillos y saltamontes, así como caracoles o escorpiones.
La culebra de escalera se caracteriza por sus dos bandas oscuras longitudinales sobre el lomo. De jóvenes muestran el clásico dibujo de escalera en el vientre, que desaparece conforme se hacen adultas. Si se sienten amenazadas, escapan con rapidez. Casi nunca muerden, y matan a sus presas por asfixia. Se alimentan de pequeños mamíferos, aves y lagartos.
La culebra de herradura se caracteriza por tener un dibujo en forma de herradura en el occipucio. Habita en terreno pedregoso o poco cubierto de vegetación. Suelen tomar mucho el sol, especialmente por la mañana. Se alimenta de pequeños mamíferos y otros reptiles.
La culebra bastarda, también llamada en la zona ‘bastardo' a secas, es una especie venenosa, aunque su mordedura no es peligrosa para los humanos. Pueden tragarse varias presas una detrás de otra sin esperar a que el veneno haga efecto. Los ejemplares adultos pueden superar los dos metros de longitud, lo que la convierte en la mayor culebra de la Península Ibérica. Ponen los huevos antes del verano, y se abren hacia finales del mismo, por lo que durante los meses de agosto y septiembre no es raro ver crías de bastardo atropelladas en los márgenes de las carreteras.
De menor tamaño y más rechoncho es el sapo corredor. Pocas veces supera los 7 cm. Se caracteriza por una raya clara que le recorre la espalda empezando a la altura de los ojos. Tiene el dorso cubierto de verrugas más o menos grandes con puntos rojizos. Tiene unas patas traseras fuertes aunque cortas, que solo le permiten saltos cortos, de manera que se mueve corriendo con bastante destreza.
En algunas aguas estancadas se localizan algunas especies de ranas y sapos, como la rana verde común. Esta rana es muy grande y robusta, de mayor tamaño que cualquier otra rana europea. Con frecuencia alcanzan tamaños de 15 cm o mayores, aunque normalmente no superan los 10 cm. Los machos son más pequeños que las hembras.
Su tamaño está determinado por su dieta, que además de insectos incluye pequeños vertebrados, como otras ranas o lagartijas. Son muy prolíficas. Las puestas dependen del tamaño del animal. Una de 9 cm pone 4.000 huevos, una de 10 cm, unos 5.000, y una especialmente grande hasta 12.000. Los renacuajos, de color verde claro, tienen forma de pera. La metamorfosis se produce después de tres meses en el agua.
El tritón jaspeado también se encuentra en algunas zonas. Tiene la cabeza tan larga como ancha y ojos pequeños con el iris dorado. Cuerpo cilíndrico con una cresta en el macho que es sustituida por un surco en la hembra. Dedos libres y aplastados. El colorido varía desde el verde oliva hasta verdoso amarillento con manchas negras que llegan a unirse formando una banda irregular a cada costado. La hembra tiene una línea dorsal anaranjada.
Realizan una puesta en los meses de febrero y marzo, compuesta por entre 200 y 400 huevos en pequeños grupos. Puede haber otro periodo de celo en otoño. Caza de noche alimentándose de gusanos, babosas y pequeños insectos. Si pierde una pata, o incluso un órgano más complejo, como una mandíbula o un ojo, es capaz de regenerarlo.
En algunas fuentes es frecuente que aparezcan tritones, en especial el tritón ibérico, que solo existe en la zona occidental de la península ibérica. Son de color grisáceo con manchas negras dispersas y el vientre de color anaranjado o amarillento con pequeños lunares negros. Tiene la cabeza redondeada y ojos prominentes. La hembra pone entre 100 y 250 huevos de unos 2 mm de diámetro, que fija a la vegetación o a cualquier otro objeto.
También son abundantes los cangrejos de río, tanto en el Águeda como en el Duero, aunque se dejan ver pocas veces por las orillas. Forma un grupo especial dentro de los decápodos. Junto con la langosta y la gamba poseen un caparazón más largo que ancho. La especie más habitual, de color rojo, es foránea, y está desplazando al cangrejo autóctono, de color azul verdoso.
Los barbos son abundantes en todos los ríos de la zona y los menos sensibles a la contaminación y el Águeda no es una excepción. Son peces grandes, alargados y de color pardo, caracterizados por tener una aleta oscura y prominente en el lomo. Forman grandes grupos y se mueven por el fondo del río. Viven unos 15 años.
Un pez que sorprende a veces por su número en remansos del río es la sarda, llamada también boga de boca arqueada, caracterizada por un cuerpo marrón claro y una franja oscura en el costado. Tiene un par de aletas que arrancan del cuello y otros dos pares más atrás.
Algunos mejillones de río se encuentran de vez en cuando en el Águeda, frecuentemente en fondos arenosos.
Uno de los peces más comunes en las aguas principalmente del Águeda es el gobio, que llega a medir hasta 14 cm. Tiene la cabeza grande en relación al resto del cuerpo, destacando los ojos.
Le gusta la corriente fuerte, aunque también se puede encontrar en aguas tranquilas, las aguas claras con alto contenido en oxígeno, con fondo arenoso o con pequeños guijarros. Se alimenta de larvas de insectos, gusanos y algunos crustáceos. Cuando el alimento escasea come huevos de otras especies. Ponen entre 1.000 y 3.000 huevos, que miden 1,5 milímetros de diámetro, cuya incubación dura entre 10 y 30 días dependiendo de la temperatura del agua.
El ave de mayor tamaño que aparece en la zona es el buitre negro, con una envergadura de 2,80 metros, pudiendo algunos ejemplares superar los tres metros. Son escasos y solo en raras ocasiones se encuentra alguno al sur del término. A diferencia del leonado, se posa y nidifica sobre árboles en lugar de en acantilados. En vuelo llama siempre la atención, incluso entre leonados de su mismo tamaño. Algunas veces captura presas vivas.
El buitre común o leonado es de las aves de mayor tamaño que puede encontrarse en la comarca. En el suelo tienen una altura de más de un metro y en vuelo poseen una envergadura alar media de 2,60 metros con las que levantan un cuerpo que puede pesar hasta 11 Kg. Muestran unas características franjas blancas y marrones claras en la parte inferior de las alas. Habita en zonas rocosas y en cañones fluviales. Se alimenta de carroña, principalmente de animales domésticos.
A veces se reúnen en grandes grupos para comer. Se han llegado a divisar grupos de más de 40 ejemplares sobre la zona del camino Duero. Se puede observar una estricta jerarquía. Los ejemplares de mayor tamaño comen primero.
Suelen anidar en las cortadas del Huebra y necesitan desplazarse a gran distancia para localizar alimento. Debido a su gran tamaño y peso necesitan ahorrar energía, por lo que aguardan a que los rayos del Sol calienten la superficie terrestre para que se creen corrientes ascendentes de aire caliente en las que poder moverse más fácilmente. A través de estas corrientes ascienden en espiral, describiendo grandes círculos.
Cuando han alcanzado suficiente altura, avanzan en línea recta, al mismo tiempo que pierden la altura conseguida. Cuando encuentran otra corriente se repite el proceso.
Así pueden desplazarse a grandes distancias con un consumo mínimo de energía y sin mover apenas las alas. En las zonas montañosas utilizan las llamadas corrientes de ladera, que les ayudan asimismo a coger altura.
Una de sus mayores dificultades es cuando tienen que atravesar zonas acuáticas, ya que en ellas no se forman las referidas corrientes térmicas, lo que les hace perder altura rápidamente. Debido a ello, en los largos desplazamientos suelen utilizar los estrechos.
Los rituales de apareamiento comienzan con el invierno. Las parejas son estables toda la vida. Solo ponen un huevo en cada temporada de cría, que incuban indistintamente el macho y la hembra durante 50 días. El polluelo, ya desarrollado dos meses después de su nacimiento, no abandonará el nido hasta los seis meses.
El milano real es un ave que se ve rara vez, ya que este suele ser territorio de buitres. Sin embargo, cuando aparece es fácilmente reconocible por su cola rojiza ahorquillada y sus dos manchas blancas simétricas en las alas. El cuerpo es también de color marrón rojizo y la cabeza blanca. Vuelan en amplios círculos aprovechando las corrientes térmicas. Utiliza la cola como un timón, moviéndola de un lado a otro. La mayor parte de sus capturas las realiza en campo abierto, volando bajo sobre el suelo o pasando rasante sobre elevaciones del terreno.
Su alimentación es muy variada. Pequeños mamíferos hasta el tamaño de ratas, comadrejas o erizos, pájaros de todos los tamaños hasta el de urracas y palomas torcaces, ranas, culebras, lagartos, peces, carroña y algunos insectos. A veces, también captura pollos y gallinas. Varias parejas pueden compartir el mismo territorio de caza.
Los machos que crían por primera vez se establecen en un territorio y llaman a todos los de su especie que pasan por allí. Si un macho acude a la llamada es expulsado violentamente, en cambio, las hembras son bienvenidas. Nidifican entre marzo y junio. Suelen poner entre dos y cuatro huevos, con un intervalo de tres días entre ellos, de un color blanco brillante con puntos violáceos o rojizos.
La incubación de los huevos dura 31 ó 32 días por huevo, y es realizada casi íntegramente por la hembra. Debido a la diferencia de días de la puesta, la duración total de la incubación llega hasta los 38 días. Hasta los 14 días conservan el plumón de nacimiento y a los 28 ya tienen casi toda la pluma de adulto. Las crías inician sus primeros vuelos no antes de 45 días y a los 50 ó 60 días abandonan el nido.
Algunos ejemplares de garza real se ven en tránsito sobre el Duero y podrían confundirse con cigüeñas de no ser por su cuello encogido. Frecuentan zonas acuosas, donde se alimentan de peces, ranas o ratas.
La cigüeña negra es un ave que se deja ver raras veces. Al contrario que sus congéneres más conocidas, las cigüeñas blancas, nidifica en cortados rocosos y árboles cerca de cursos de agua. Pone de 2 a 4 huevos entre mayo y julio. Se alimenta de pequeños peces, ranas, tritones, sapos, reptiles e insectos acuáticos, que captura en aguas superficiales de ríos, arroyos y charcas.
Llega a últimos de febrero y en septiembre inicia su migración anual hacia África. Su plumaje es negro irisado en cuello, dorso y alas, con pecho y vientre blancos. Las patas y el pico son de color rojo. Los jóvenes tienen un plumaje pardo con patas y pico de color verde. Tiene una envergadura de hasta un metro y medio y puede pesar hasta tres kilos.
Muy extendidos están los pinzones, los cuales a veces pue-den ser confundidos con otras especies. Rasgos distintivos son las dos bandas blancas laterales y la cabeza parcialmente gris con mejillas encarnadas. Ponen una nidada en primavera de entre 4 y 5 huevos. Se alimentan de orugas que buscan en los troncos de los árboles, aunque tampoco hacen ascos a semillas y bayas cuando no las encuentran.
En el valle del Duero, el cormorán suele verse con frecuen-cia. Son aves grandes (1,5 m de envergadura y 2,5 kg de peso) de color negro con vientre blanco y pico ganchudo de gran tamaño. Se encuentran tanto en agua salada como dulce. Capturan peces en largas zambullidas desde la superficie. Los mayores los sacan antes de tragarlos. Suele aparecer más en invierno, aunque es residente en los pantanos y ríos de Arribes, por lo que puede verse todo el año.
El águila o aguililla calzada por su reducido tamaño, es escasa en la zona. Existe una forma clara (en la imagen) y otra oscura. Tiene una zona translúcida intermedia en la banda trasera de las alas. Suele encontrarse en zonas cálidas arboladas. Pone dos huevos entre febrero y abril.
Un ave parecida al gorrión en tamaño y forma es el pardillo común, pero se sale de dudas en cuanto se lo observa más de cerca, gracias a su cabeza enteramente gris y su cuerpo anaranjado. Se desplazan y comen en grupos más o menos numerosos. Buscan en el suelo las semillas con las que se alimentan, aunque crían a sus polluelos con insectos. Nidifica entre abril y junio, con 2 ó 3 nidadas de entre 4 y 6 huevos.
El alcaudón común es un ave que se encuentra principalmente en invierno y es raro de ver en verano, aunque es residente en la Península Ibérica. Es el alcaudón mayor de Europa. Muestra un color grisáceo con una banda negra en el ojo y un papo blanco. Utiliza altos en árboles o cables para lanzarse sobre sus presas: roedores o pájaros pequeños como jilgueros o gorriones, a los que atrae imitando su canto, y a los cuales empala en arbustos espinosos antes de ir a por otra presa. Cuando no los encuentra se alimenta de insectos.
Los mirlos son aves generalizadas en toda Europa, y se encuentran en las zonas de penillanura habitualmente a nivel del suelo. Su cuerpo es totalmente negro con un círculo amarillo alrededor del ojo y pico también amarillo. Busca su comida en el suelo, entre la hojarasca. Se alimenta prácticamente de todo, especialmente gusanos, insectos, bayas, frutas y pan.
Esta especie que se ve a veces en zona de pastos y descampados se caracteriza por tener una cara blanca rodeada de un capuchón y un babero negros. Come en el suelo, moviéndose continuamente en busca de insectos, semillas o volando tras alguna mosca. Hace 2 ó 3 puestas al año de 5 ó 6 huevos cada una entre abril y agosto.
Con una estampa similar al petirrojo se encuentra el colirrojo, caracterizado por el tono rojizo de su cola y unas manchas triangulares blancas en las alas más evidentes en la primavera. La hembra es más parda. Come insectos que caza en vuelo o semillas o bayas que recoge del suelo.
En algunas fuentes y sitios húmedos se encuentran unos parientes de las arañas llamados opiliones, los cuales se agrupan por docenas. A diferencia de las arañas tienen el cuerpo en un solo bloque, no son venenosos y no tejen tela. Además solo tienen dos ojos. El segundo par de patas es más largo que el resto y se usa como órgano sensorial. Pierden las patas con facilidad, pero al contrario que las arañas, estas no se regeneran.
La araña de la cruz es fácilmente reconocible por las marcas blancas en forma de cruz de su abdomen. Su color es muy variable. Aparecen en los meses de verano y otoño. Teje una tela circular de unos 40 cm de diámetro.
La trematocephalus cristatus es una araña enana con un cefalotórax anaranjado y abdomen negro. Suele vivir en ambientes húmedos. Tienen los ocho ojos dispuestos en dos filas verticales.
La steatoda triangulosa se caracteriza por tener un triángulo negro en la cabeza y manchas negras y pardo-rojizas en el abdomen. Sus patas se encuentran anilladas de negro. Teje telarañas irregulares.
La tegenaria atrica pertenece a la familia de los agelénidos, un grupo de arañas que confeccionan telas en forma de túnel. Muestra patas largas, abdomen ovalado con marcas en forma de V invertida. Son frecuentes en casas y jardines. Los ejemplares grandes que se ven moviéndose dentro de las casas suelen ser machos en busca de pareja.
Grandes bandadas de estorninos recorren la región. Tienen patas fuertes y largas que los mantienen en una posición erguida, con las que son capaces de caminar muy deprisa. Emiten un sonido característico que los hace inconfundibles, formando a veces grandes algarabías, sobre todo al atardecer, cuando se reúnen para pasar la noche en sus árboles dormidero.
En otoño e invierno cada una de las plumas de la cabeza, el dorso y la parte inferior presenta una punta clara que luego desaparece desgastada por el uso al llegar la primavera. Las crías son de color pardo mate. Producen un sonido que es mezcla del de otros pájaros, y cuando cantan lo hacen con el plumaje desordenado. Se alimentan de insectos, caracoles y fruta.
Grandes bandadas de estorninos recorren la región. Tienen patas fuertes y largas que los mantienen en una posición erguida, con las que son capaces de caminar muy deprisa. Emiten un sonido característico que los hace inconfundibles, formando a veces grandes algarabías, sobre todo al atardecer, cuando se reúnen para pasar la noche en sus árboles dormidero.
En otoño e invierno cada una de las plumas de la cabeza, el dorso y la parte inferior presenta una punta clara que luego desaparece desgastada por el uso al llegar la primavera. Las crías son de color pardo mate. Producen un sonido que es mezcla del de otros pájaros, y cuando cantan lo hacen con el plumaje desordenado. Se alimentan de insectos, caracoles y fruta.
El petirrojo es un pájaro que hace del rojo su color distintivo, en forma de un corazón invertido en el pecho, siendo la parte inferior blanca. Tiene un pico fino, ojos negros y una habilidad extraordinaria para colocarse en las finas ramas de algunos árboles.